AVISO IMPORTANTE

¡BIENVENIDOS AL NUEVO PORTAL GUILLERMOBARBA.COM!

Estimados lectores de Inteligencia Financiera Global: Este blog se ha mudado definitivamente al nuevo portal de GuillermoBarba.com . Agr...

viernes, 20 de diciembre de 2013

EL ORO SE HA IDO...




Imagen: endthelie.com
En este blog hemos puesto un marcaje personal al tema de la transferencia masiva de oro que está ocurriendo desde Occidente hacia el lejano Oriente, en particular a China, que este año se convertirá en el primer consumidor mundial del metal.

Hemos explicado que la ruta del oro en la mayoría de los casos está siendo Inglaterra – Suiza – Hong Kong – China continental.

Suiza es destino obligado intermedio por la gran capacidad de refinación que posee, y que le permite convertir el oro de lingotes “Good Delivery” (estándar definido por la London Bullion Market Association, LBMA) en barras u otros formatos que se ajusten a las necesidades y características que demandan los consumidores chinos.

Para quien está al tanto de esta situación, no le sorprenderá lo dicho por expertos como Keneth Hoffman, titular del área de Investigación en Minería y Metales de Bloomberg Industries, quien la semana pasada comentó en televisión: “Podías ir a una bóveda en Londres hace un par de años y (estas) estaban llenas a rebosar (…) Puedes entrar en esas bóvedas hoy y están virtualmente vacías.”

Hoffman coincide con lo que aquí, como sabe, hemos dicho desde hace mucho tiempo: “el oro se ha ido a China para nunca regresar” (vea el video al final de este post). Sentencia además: "Los chinos ya no quieren dólares, quieren oro". Y tiene razón.

Las importaciones de oro de los chinos continentales se siguen acelerando. Las cifras más actualizadas del Departamento de Estadísticas y Censo de Hong Kong (HK) dan cuenta de ello.

De enero a octubre pasados, el monto neto de oro exportado de HK a China continental fue de 957 toneladas, 200 por ciento más que en el mismo período de 2012.

El principal proveedor sigue siendo, como dijimos, Suiza. Las importaciones de HK desde aquel país europeo, en lo que va del año, ascienden a unas impresionantes 782 toneladas.

Los otros grandes proveedores en 2013 han sido Australia (141 toneladas), Reino Unido directo (92 tons.), Estados Unidos (172 tons.) y Sudáfrica (138 tons.).



clic para ampliar

China continental no publica datos de su comercio de oro, por lo que las estadísticas de HK son el mejor referente que tenemos.

Por supuesto, la demanda total de oro del país asiático es mucho mayor a lo que el mismo Consejo Mundial del Oro (WGC, por sus siglas en inglés) estima, alrededor de 1 mil toneladas para este año.

Según cálculos con base en datos recopilados por Alasdair Macleod, especialista de Goldmoney.com, el total de compras conjuntas efectuadas por China y Hong Kong en los primeros nueve meses del año, fue de 2,130.7 toneladas, o sea un anualizado de 2,841 tons. a las que habría que sumar todavía su producción minera (400 tons. más).

Para dimensionar mejor qué tan grande es esta cantidad, recordemos que según el WGC la oferta minera mundial en 2012 fue de 2,824.4 toneladas.

Es un hecho que para China el oro es un tema estratégico en sus planes de avanzar hacia un mundo “desamericanizado”. No por nada desde el gobierno se alienta la inversión de las personas en él, mientras también acumula reservas en secreto.

China no actualiza este dato ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) desde abril de 2009, cuando las fijó de modo sorpresivo en 1,054.1 toneladas desde las 600 que decía tener desde 2003.

La regla de oro jamás pierde vigencia: “quien tiene el oro pone las reglas”.

Hoy que la discusión vuelve a centrarse en los descendentes precios del oro y su vinculación con el recorte de estímulos monetarios de la Reserva Federal estadounidense, debemos esperar que esta transferencia del metal se mantenga o incluso se acelere todavía más.

Está claro que Occidente le seguirá haciendo el favor a los asiáticos de seguirse llevando el tesoro a precios de ganga, pero también, que en el futuro las tensiones internacionales podrían escalar a niveles peligrosos cuando el inevitable colapso del sistema se presente y todos se pregunten: ¿quién se ha llevado nuestro oro?

Tarde o temprano, como en el juego de las sillas, alguien se quedará fuera sin el metal que creía poseer. Cuando la música deje de sonar, nos daremos cuenta de que el mundo ya no es el mismo, y que cambió ante los ojos de todos, pero que pocos, muy pocos, fueron capaces de darse cuenta de lo que estaba sucediendo. Para entonces, ya será tarde.



miércoles, 18 de diciembre de 2013

¿POR QUÉ HA CAÍDO EL PRECIO DEL ORO?




Imagen: Bloomberg
El oro acumula ya doce años consecutivos de cierre al alza. Sin embargo, 2013 será casi seguro el primero en que se rompe esta racha, aunque a decir verdad, su período de corrección (baja) comenzó desde septiembre de 2011, tras alcanzar su máximo histórico de 1,923.70 dólares la onza troy (31.1 gr.)

Muchas dudas surgen al respecto entre especialistas, académicos e inversores respecto a qué futuro le aguarda al rey de los metales, y sus explicaciones en la mayoría de los casos van desde las más simplistas hasta las más elaboradas, pero casi siempre como agoreras del desastre –al estilo de Nouriel Roubini.

Por ello, es conveniente hacer algunas precisiones.

Primero, debemos decir que son varios los factores que han marcado la caída del oro: la duración extraordinaria de su dirección alcista de 12 años, los aparentes menores riesgos de inflación ante los ojos de los inversionistas, la sobreoferta de oro a causa del sistema de reserva fraccionaria con que operar los “Bullion Banks” (especializados en metales preciosos), derivados y "préstamos" de oro de los bancos centrales; y la manipulación del mercado por parte de "traders" y banqueros sin escrúpulos que buscan beneficios muy específicos.

No es normal que cualquier clase de activo tenga un lapso ascendente tan largo, sin que se presenten correcciones que duren incluso varios años.

En este sentido, el oro ya lleva más de dos en fase correctiva, y eso para su tendencia mayor de largo plazo no es solo sano sino muy positivo, y claro,  aún dista mucho de llegar a su final.

El ciclo alcista del oro tardará quizá varios años más en concluir, pero cuando lo haga, lo hará como mueren todos los "toros" (mercados ascendentes), es decir, en fase de euforia o burbuja total. Seguimos lejos.

Hay quien clama que el oro estaba en burbuja por arriba de 1,900 dólares, pero eso es incorrecto. No puede hablarse siquiera de haber estado cerca de una burbuja real, pues ajustado por inflación oficial, el viejo máximo histórico del oro de 1980 que fue de 850 dólares, está ahora por encima de los 2,400.

Como mera referencia para estimar qué tanto podría continuar todavía el mercado alcista del oro, podemos mirar la duración del ciclo bajista que le precedió: de 1980 a 2000.

Así que aunque no sabemos si durará dos, tres, cinco o siete años más, lo cierto es que luego de estas correcciones y volatilidad, la racha será retomada.

Otra de las causas centrales de este descanso en el avance del oro, es que las expectativas de inflación de los inversionistas se han moderado o descendido a pesar de los continuos estímulos monetarios no solo de la Fed, sino del Banco de Japón, Inglaterra y el mismo Central Europeo.

Sea con "flexibilización cuantitativa" (QE) o recortes a tasas de interés, estos institutos centrales pretenden reinflar la economía a como dé lugar, y en este sentido, se supone que el oro como activo refugio ante la inflación, sería el más beneficiado.

No obstante, como la inflación no se ha disparado sino que al contrario, el temor a la deflación es cada día mayor, la lógica de muchos inversores es que si no habrá inflación no necesitan del oro y han liquidado posiciones importantes. Grave error.

Quien piensa que de momento no hay riesgos inflacionarios mayores tiene razón, pero justo en eso reside el problema de que desprecien al oro.

Si el oro es necesario en inflación, es indispensable en deflación que se asoma con peligro, pues en ella la última instancia es el trueque, y por su condición de dinero real, pase lo que pase seguirá funcionando como tal.

En inflación el dinero papel es basura; en deflación puede ser útil pero incluso entonces es inferior al oro, pues es un hecho que para combatir esa presión deflacionaria producto del colapso de todo (de las deudas impagables, índices bursátiles, precios, cierres de empresas, quiebras de países enteros, etc.), la "solución" de los bancos centrales será inundar más, sí, aún más, el mundo de billetes.

Echarán a andar como nunca en la historia las imprentas a nivel global y buscarán la manera de que entre a la circulación (ojalá que no sea con guerra), hasta que consigan su meta de tener una inflación que, entre más alta, sea mejor para intereses oficiales, tan inflados de deudas.

El oro entonces, seguirá reinando.

Ahora, los fondos cotizados en este sentido también han jugado un papel importante en las ventas de oro recientes, al grado que los 14 mayores desplomaron este año sus tenencias áureas en 31%, su primer recorte anual desde que comenzaron a operar hace 10 años.

Y es que muchos inversionistas fueron atraídos por el oro, como suele ocurrir, por el simple hecho de que estaba "subiendo mucho"

Quedan todavía bastantes de ellos y sus “manos débiles” como se les conoce en el mercado, por lo que no debemos descartar una capitulación final que podría llevar al precio de la onza a niveles cercanos a mil dólares. Todo es posible, sobre todo si consideramos que correcciones del orden del 40 al 50% son normales, como también se observó durante el mercado alcista de los ’70.

Ahora, aquí debemos enfrentarnos a un problema que la mayoría de los financieros desconoce o de plano menosprecia. El oro no es cualquier commodityEs la materia prima dinero, y como tal, no se tira ni se consume. Esa es la característica más importante que lo diferencia de las demás, y el motivo por el cual tiene el ratio más alto stocks-to-flow (existencias sobre flujo) de todas.

Así que el oro tiene siempre dueño. Lo malo es que luego de la creación de los derivados de oro, más el sistema de reserva fraccionaria con que operan los "Bullion Banks" y los "préstamos" de oro que hacen algunos bancos centrales, existe una falsa sobreoferta del metal que hace que no haya oro físico que respalde las existencias que todos piensan tener.

Hay oro pero no para todos. 

Por eso con los descensos de precio, las "manos fuertes" aprovechan para entrar a  retirar todo el metal que les es posible de la circulación. Estos inversores son duros y no soltarán el metal casi bajo ninguna circunstancia, y si lo hacen será hasta que el precio llegue a reflejar de forma más certera la realidad de su valor.

Esto es  justo lo que están haciendo los asiáticos, en particular los chinos, como lo demuestran las estadísticas de importación de oro que les llega desde Occidente.

El Comex americano es así pues, básicamente un mercado de "oro" papel mientras que la bolsa de oro de Shanghai es sobre todo de intercambio físico.

A propósito, dice mucho que el número de "dueños" por onza física en los almacenes del Comex sea de casi 110.

Mexicana onza de oro "Libertad"
Como sabe, el análisis de la Base y la Cobase del oro que presentamos en este blog, mide la relación entre el precio al contado y el de los contratos de futuros de oro (y plata).

Lo que nos revela este estudio es que la "backwardation", que ocurre cuando el precio de la onza spot es más alto que el de los futuros, se debe a que hay inversores que prefieren llevarse su oro a casa hoy, aunque sea más caro, que esperar a una mera promesa de entrega más barata en el futuro.

Esta situación se ha agravado este año, lo que confirma que el oro se sigue "acabando", escondiendo de la circulación en manos privadas.

¿Qué ocurrirá cuando comiencen a ocurrir los incumplimientos de entrega que seguro se presentarán tarde o temprano?

Respecto a otro factor muy importante en la caída de los precios del oro, y que funciona como un tabú, es el de la manipulación de su mercado. Es tabú porque nadie cree en eso ahora, como tampoco creían que se manipulaba la tasa Líbor, y ahora ya sabemos el tamaño del escándalo.

Alemania es quizá el caso más reciente en la materia, pues ha comenzado una investigación federal al respecto sobre el Deutsche Bank, uno de los cinco participantes en la determinación del “London Gold Fix”, capital global de la manipulación, cuyas raíces subterráneas conducen sin duda también a la misma Reserva Federal estadounidense.

Así que todos estos factores, además de los puramente técnicos, han determinado que el precio del oro haya descendido, pero al mismo tiempo, se ha explicado los motivos por los cuales el oro (y la plata) está más vivo que nunca.

Al final, el mercado –mucho más fuerte que cualquier banco central, terminará por acomodar las cosas en su justo sitio por la fuerza, y solo entonces, podremos comenzar a hablar de una auténtica recuperación de la economía mundial. Ojalá venga una reforma monetaria global que ponga al oro en el lugar del que nunca debimos moverlo. Mientras tanto, a preparase para ello.

lunes, 16 de diciembre de 2013

PRECIO DEL ORO: LA GRAN MANIPULACIÓN




Imagen: Bloomberg

La manipulación del precio del oro durante mucho tiempo ha sido considerada poco menos que una teoría conspirativa.

Esto no debe sorprendernos en absoluto, pues desde siempre, poderosos intereses que llegan a lo más alto del poder político y financiero mundial, se han preocupado por ocultar al máximo tanto sus propósitos como sus métodos, y por desacreditar a todo aquel que se atreva a desafiarlos o exhibirlos.

Sin embargo, esta condición parece estar cambiando, seguramente por la fuerza de las circunstancias y por el nivel de gravedad de las violaciones al libre mercado no solo de ese metal precioso, sino también al de su compañera: la plata.

En este sentido ha llegado el turno de Alemania, que según un reporte del Financial Times publicado la semana pasada, a través de su regulador financiero federal BaFin, ha solicitado durante visitas a lo largo de los últimos meses, diversos correos electrónicos, documentos y entrevistado a funcionarios del Deutsche Bank (DB) como parte de su investigación sobre una “potencial” manipulación de los precios del oro y la plata.

Por supuesto, después del escándalo global por la manipulación de la tasa de referencia Líbor destapado en 2012, los ojos de las autoridades comienzan a mirar más hacia donde antes no querían. Desde luego, esto responde más a las presiones y exigencias de la opinión pública para que cumplan con sus obligaciones, que a un compromiso genuino de estas por hacer  su trabajo.

Así lo confirman indagatorias similares en otras latitudes y momentos, que han terminado con una decepcionante conclusión de que “no hay nada que perseguir, todo está bien”.

Recordemos el reciente caso de la pesquisa efectuada por la Commodity Futures Trading Commission (CFTC) –el regulador estadounidense, sobre la manipulación del mercado de la plata en ese país. Luego de largos cinco años de supuesto trabajo, concluyó en septiembre pasado que “siete mil horas del personal de investigación no produjeron evidencia de mala conducta.”

A decir verdad, poco se podía esperar de una acción en la que, hacia el final del camino, las pistas terminarían yendo a dar a las puertas de la misma Reserva Federal y el Tesoro de Estados Unidos, como lo debieron haber descubierto.

Como quiera que sea, la investigación actual encabezada por Alemania, da una renovada luz de esperanza a pesar de sus limitaciones, pues solo tiene jurisdicción sobre el Deutsche Bank.

Y es que las investigaciones se centran en las transacciones efectuadas en el llamado “London Gold Fixing”.

Deutsche Bank es una de las cinco instituciones bancarias que toman parte dos veces al día vía telefónica (a las 10:30 y a las 15:00 hrs.) en ese mecanismo de fijación de precios de referencia del oro en Londres, capital global del intercambio del metal. Las otras cuatro son: Barclays, Bank of Nova Scotia, HSBC y Société Générale.

La plata tiene un proceso análogo pero solo entre tres bancos, incluido también el DB.

El resultado de aquella determinación del precio “fix” del oro por la mañana y por la tarde, es una referencia muy importante que se emplea en todo tipo de transacciones y contratos con el metal.

Desde empresas mineras y joyerías hasta bancos centrales usan este “fixing” para negociar sus intercambios. Justo por esa trascendencia y el bajo número de actores que la determina, es que por años se les ha acusado de operar operar para beneficio propio, como ha ocurrido en muchos otros mercados.

En noviembre, trascendió a través de Bloomberg que en el Reino Unido, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés) comenzó la revisión de las referencias de los precios del oro como parte de un sondeo más amplio, respecto a cómo  se determinan las tasas de interés en el mundo.

Aunque esta revisión es preliminar y aún no habría alcanzado el grado de investigación formal en el Reino Unido, lo cierto es que la contraparte alemana se está tomando muy en serio lo que está sucediendo en el mercado de metales preciosos.

Imagen: Bloomberg
La simple existencia de un “fix” matutino y otro vespertino, da pie a que personas con información privilegiada y adelantada solo unos segundos o fracciones de éste, puedan sacarle mucho provecho económico antes de que se haga pública.

Como ve, hay incentivos muy atractivos para que estas compañías traten de influir a su conveniencia sobre las cotizaciones, con la venia, complicidad o incluso dirección de órganos o autoridades oficiales.

El oro es la medida de valor de todas las cosas, y por ende, de todas las divisas del planeta. Esa posición lo convierte en el blanco, en el enemigo a combatir por parte sobre todo de gobiernos y bancos centrales emisores de las divisas de “reserva”, que en la subida del precio del oro tienen la expresión inocultable de la pérdida de “valor” de sus monedas.


Así que aunque es positivo que cada día más los medios predominantes comiencen a hacer eco de lo que otros hemos expuesto desde hace mucho tiempo, lo cierto es que se puede esperar realmente poco de estas investigaciones sobre manipulación de los mercados de oro y plata, que terminan siendo burocráticas y simples pantallas. El sistema, no se perseguirá a sí mismo.

La buena nueva es que, como en todas las ocasiones en que se ha practicado, el teatro de la manipulación acabará cayendo por su propio peso, y el oro y la plata, por  la fuerza del mercado, terminarán por imponerse.

Víctimas de su propia trampa, los manipuladores se darán cuenta, muy tarde, que mientras practicaban sus juegos sucios alguien más se estaba llevando el tesoro muy lejos de sus manos a precio de ganga, y un día ya no lo tendrán. Se habrá ido tan lejos como a India y China, de donde no volverá.

En el pecado, los manipuladores, llevarán la penitencia.

viernes, 13 de diciembre de 2013

REFORMA ENERGÉTICA: UNA BUENA NOTICIA




Imagen: vertigopolitico.com
Esta semana el Senado y la Cámara de Diputados aprobaron la tan pospuesta reforma energética en México que, debemos decir, todos sabíamos que era necesaria, impostergable, pero que los tiempos y la ausencia de un liderazgo político con la fuerza suficiente, terminaron por impedirla durante varios sexenios.

Hoy debemos festejar que ya sea una realidad, pues el mundo no se detiene y este sector estratégico se nos estaba convirtiendo en un verdadero lastre.

Del mismo modo en que aquí antes criticamos una pésima reforma como la hacendaria y una muy peligrosa como la financiera, debemos reconocerle al gobierno de Enrique Peña Nieto el haber sabido negociarla.

Y es que la verdad, si somos autocríticos, durante décadas nuestro país ha vivido un indigno y cruel atraso económico del que nada más no hemos podido salir.

Crisis recurrentes, bajo o nulo crecimiento por decenios, poca creación de empleo, explosión de la informalidad, etc. han sido un cáncer para la economía nacional, mientras otros países que comenzaron en condiciones similares o incluso peores que las nuestras en la segunda mitad del siglo pasado, han alcanzado ya un nivel de desarrollo notable.

¿Cuál ha sido la clave de su éxito? Algo que aquí se volvió un tema tabú: el de la apertura plena a una economía capitalista de libre mercado, donde impere el respeto a la propiedad privada, una competencia plena y se desarrollen las habilidades empresariales. Así de fácil y de difícil.

Por eso es una pena mayúscula que más por dogma, tradición o por lo que usted guste, los mexicanos nos hayamos aferrado durante tanto tiempo a viejas creencias que nos mantienen atados al pasado, eso sí, con la falsa idea nacionalista que nos vendieron de que “es lo mejor”.

El caso más representativo de esto es sin duda, el del tema energético, y en particular, el petrolero.

Crecimos con una educación que desde siempre, nos enseñó las supuestas virtudes de una economía socialista como la que promovió el presidente Lázaro Cárdenas, y que tuvo en la nacionalización de la industria petrolera su máxima expresión.
Imagen: criteriohidalgo.com

Sin embargo, esa ideología nos terminó condenando a un injusto atraso y cerrazón que seguimos arrastrando, y con los que es indispensable terminar si lo que queremos es un progreso real.

Quizá uno de los mejores ejemplos de qué tanto pueden cambiar las cosas es viendo lo que ocurrió con China, que prácticamente en 30 años pasó de ser un país sumido en el atraso y la pobreza totales, a ser la segunda economía del mundo de hoy, solo después de la de Estados Unidos.

A pesar de que en el papel los chinos se mantienen buscando una economía socialista, lo cierto es que sus políticas aplicadas son cada vez más capitalistas, y tras la última reunión Plenaria del Comité Central del gobernante PartidoComunista celebrada en noviembre pasado, han declarado que van por una participación todavía más amplia del mercado en la asignación de los recursos económicos.

No hay marcha atrás. Ya les gustó.

Por eso México avanza en el sentido correcto con la reforma energética. No se privatiza ni desaparecen Pemex ni la CFE, pues ni siquiera había necesidad de hacerlo. Pero en cambio, tendrán que volverse más productivas, competitivas y eficientes, algo que redundará en su propio beneficio y el de todos.

El Estado mexicano tendrá más ingresos, aprovechará mejor sus recursos naturales –que de otra manera seguirían en el subsuelo sin poder ser extraídos, y con mayor inversión nacional y extranjera habrá muchos empleos creados por las nuevas empresas de este sector. El beneficio en este sentido, será palpable.

Eso sí. La reforma energética no hará maravillas ni nos vendrá en automático el desarrollo. Una cosa es dar un paso en sentido correcto y otro, muy distinto, que el gobierno por fin haya decidido dar un golpe de timón para enderezar el rumbo nacional.

Para eso antes seguirá siendo indispensable que, a una economía de mercado que por sí sola no es suficiente, desde el gobierno se le acompañe con una política de inversión y promoción del ahorro, que aún no se ve.

Ese sigue siendo un grave pendiente en la agenda, pues como sabe mucho se ha hablado de promover el otorgamiento de más créditos y más baratos, más déficit y deuda para estimular el crecimiento económico, pero nada, en absoluto, sobre la generación de capital como una política central del Estado.

Al contrario. La idea del gobierno de la República sigue la misma equivocada línea keynesiana de impulsar la economía con derroche y endeudamiento, algo que con suerte puede funcionar en el corto plazo, pero que luego, termina por perder más de lo ganado.

Imagen: eleconomistaamerica.mx
Si un día somos capaces de hacer lo contrario, promovemos la creación de capital, acumulamos ahorros públicos y privados, nos volvemos más productivos y elevamos nuestra calidad en esa economía de mercado capitalista, entonces sí podremos estar seguros de que iremos por la senda correcta del desarrollo sostenido.

Mientras tanto, bienvenida la reforma energética. Es un avance que le urgía a México.

El presidente Peña tiene ahora la gran oportunidad de corregir el rumbo en materia fiscal y financiera en lo que queda del sexenio: olvidarse del déficit, de más deuda y subir impuestos a los mismos de siempre.


Se antoja muy difícil por la gran cantidad de “beneficios” sociales a que se ha comprometido, y su inquietud por lograr crecimiento pronto. No obstante, es su turno de trascender como estadista reformador y no como un gobernante más. Veremos si toma el tren o lo deja pasar pero, lo cierto, señor presidente, es que aún no es tarde.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

ORO Y PLATA, ¡JUNTOS EN BACKWARDATION!




Imagen: bullionmarketthinking
El oro y la plata están de forma simultánea en backwardation. A manera de recordatorio y explicación para nuestros estimados lectores, cabe subrayar que en este blog se expone un análisis del mercado de metales preciosos monetarios muy diferente a los tradicionales: el de la llamada Base y Cobase de ambos.

La razón es que los típicos análisis técnicos no ofrecen un panorama completo, como el que es indispensable tener, para una correcta toma de decisiones.

Aunque útiles, por desgracia no nos revelan algo mucho muy importante: cuánto ha aumentado en el mercado la propensión de los inversores a acumular oro y plata físicos, con independencia del nivel de precios que se observe, ya que este es determinado (todavía) sobre todo en el mercado de “papel” (futuros).

Dicha propensión queda expuesta cuando comparamos las diferencias entre los precios de ambos metales al contado (spot), y los que se observan en sus contratos de “futuros”, o sea, en los que se promete la entrega del metal adquirido en fecha posterior.

De esa observación se obtienen la Base y la Cobase.

La Base es el resultado de restar del precio del contrato de futuro, el “spot”. Dado que la normalidad es que los futuros sean más caros que el precio corriente, la cifra debería ser positiva. Esto se conoce como “contango” (curva ascendente). Pero si el resultado obtenido es negativo, muestra una inversión en la curva que se conoce como “backwardation” (curva descendente).

Por su parte, la Cobase se obtiene restando del precio “spot” el del contrato de futuro que corresponda. Por eso se está en “contango” cuando el resultado es negativo, y en “backwardation” cuando hay lectura de Cobase positiva.

Esto último es señal de que hay en el mercado una “escasez” de existencias del metal, ante una amplia demanda física. Justo esto es lo que se está presentando al mismo tiempo en el mercado del oro y la plata, pues como dijimos al inicio, ambos están en backwardation.

En el gráfico siguiente (cortesía de Sandeep Jaitly de feketeresearch.com), se observa el comportamiento de la base (líneas azules) y la cobase (líneas rojas) para los contratos de oro con vencimiento en febrero y abril 2014 (éste en líneas difuminadas). La última lectura para la cobase de febrero es de +0.24%.

clic para ampliar
El mes pasado le informamos que por primera vez en el año, la plata había entrado en backwardation hacia el 5 de noviembre. No obstante, esta condición persiste.

El contrato de plata a diciembre (no se muestra en la gráfica) ha dado paso al de marzo, que ya muestra asimismo una backwardation con una lectura positiva de 0.17% anualizada. El hecho de que la backwardation en la plata se presente con tanta anticipación al vencimiento del contrato, no tiene precedentes.

Tampoco que en el oro el contrato de febrero ya esté (de nuevo) en backwardation como se muestra en el primer gráfico.

¿Por qué es importante recalcar todo esto?

Porque como también hemos advertido aquí con anterioridad, el oro y la plata se están “escondiendo” de la circulación.

De manera discreta pero consistente, mientras el precio del metal se mantenga cerca de los niveles actuales a causa de ventas masivas de contratos de “papel”, alguien más seguirá aprovechando, sobre todo en India y China, para tomar todo lo que puedan a precio de ganga. Eso sí, en metal contante y sonante.

Dado que en lo que va del año el contrato de oro más activo ha estado fuera de backwardation solo durante pocos días (ver siguiente gráfico de Sandeep Jaitly), puede afirmarse que hemos llegado a la tan temida fase de backwardation (cobase positiva) permanente.

clic para ampliar
De aquí en adelante, salvo algunas fluctuaciones, observaremos cómo esa condición tiende a agravarse.

Cada día más inversores optan por comerciar con operaciones de pago al contado contra entrega física de oro y plata. Esto que debería ser siempre de lo más normal del mundo, no lo es por una sencilla razón: no hay metal precioso que alcance para todos.

El sistema de reserva fraccionaria con que operan los “Bullion Banks” y hasta los inventarios del Comex (Commodity Exchange), que cuentan a la fecha con 108 “dueños” por cada onza de oro en sus almacenes, son muestra de ello.

De ahí que la aparentemente atractiva operación de “ganancia con riesgo cero” para los tenedores de oro y plata cuando hay backwardation, no se esté efectuando.

Y es que en teoría ese inversionista con metal físico podría venderlo hoy con una ganancia (gracias a que el precio spot es más alto que el del futuro a febrero), y de forma simultánea comprar ese futuro con vencimiento en febrero 2014. Vendió caro y compró barato en un solo instante, por lo que ahora solo tiene que esperar sentado unos meses a que le entreguen de vuelta metal equivalente a lo que enajenó.

Ese tiempo de espera puede ser mortal, pues llegará el momento en que al inversionista, no le puedan cumplir. Alcanzado ese punto, no es difícil imaginar el caos que se generará, ni lo que ocurrirá con los precios de los metales preciosos expresados en divisa fíat (dólares, euros, etc.).

Así que mientras los bajos precios ahuyentan a la mayoría en Occidente, muy pocos se están preparando para ese momento, en silencio, acumulando más dinero real (oro y plata) con cada baja que se presenta.

Es la reacción natural a la manipulación global a la baja de las tasas de interés e impresión monetaria, que los bancos centrales están realizando para intentar estimular con más deuda la economía planetaria, enferma justo por el exceso de deuda, consumo y crédito.

Esa colosal montaña deflacionaria que nos caerá encima, y que pocos ven venir, es la que los fuerza a repudiar cada vez más las divisas fíat en favor del oro y la plata, que no deja de irse al lejano Oriente. El mensaje de su base y su cobase, está ahora descifrado y a la vista de todos. Ojalá, que no lo ignoren nuestros lectores.

lunes, 9 de diciembre de 2013

CHINA: DURO GOLPE A BITCOIN




Imagen: businessinsider.com
La semana pasada explicamos que el experimento llamado Bitcoin, que se supone intenta convertirse en una “divisa” virtual sin el control de ningún gobierno ni banco central, podría tratarse en realidad de una estafa bien diseñada matemáticamente para beneficio de sus creadores, de “insiders” o hackers profesionales.

Dijimos también que incluso si le dábamos el beneficio de la duda, y pensábamos en ella como un intento legítimo por escapar de la corrupción monetaria que padece el mundo en nuestros días, sería un entonces una buena idea con una mejor intención.

Sin embargo, aclaramos que aunque así fuera, quienes participan en su mercado deberían tener mucho cuidado, pues Bitcoin puede ser muchas cosas, todo, pero menos dinero. Es en cambio, una simple promesa de pago en las divisas tradicionales que ya conocemos.

De ahí que advirtiéramos que los superlativos y promesas hechas por sus fanáticos, cada día se parecen más a los discursos que emplean los vendedores de algún activo que está en burbuja, o de plano, de esquemas Ponzi.

Pues bien, a pesar de que los defensores de Bitcoin gustaban de presumir que en China estaba teniendo una gran aceptación con la venia de las autoridades, lo cierto es que el banco central de ese país les ha pues un “hasta aquí”.

Sí. El jueves pasado, el Banco Popular de China (PBOC, por sus siglas en inglés) prohibió a las instituciones financieras efectuar transacciones con Bitcoin. En específico, no podrán: dar precios en Bitcoin, comprarla o venderla ni asegurar productos basados en ella.

Como era de esperarse, de inmediato su precio se desplomó más de 20 por ciento, a menos de mil dólares, desde los más de 1,200 dólares en que se encontraba.

El PBOC sentenció que no es una divisa con “significado real”, y por lo tanto, no tiene el mismo estado legal.

La prohibición es sin duda una prevención del gobierno chino, ante un incremento en el riesgo de que este tipo de instrumentos, terminen siendo una fuga de los controles financieros que mantienen sobre el yuan.

Aunque esto puede sonar exagerado, sobre todo debido a que la capitalización completa de Bitcoin –que se estima en más de 10 mil 800 millones de dólares al precio de una Bitcoin este lunes (alrededor de 900 dólares)- no representa una amenaza para el tamaño del sistema financiero chino, lo cierto es que las autoridades han querido dejar claro que los ciudadanos son libres de usarla, mientras no se salga de ser lo que es: un juego de alto riesgo.

Por eso ha trascendido que es probable que las autoridades reguladoras como el PBOC y la Comisión Reguladora de la Banca de China establezcan reglas para facilitar las operaciones de compra – venta de la “criptodivisa”.

Y es que el gobierno tampoco quiere que se multipliquen los casos de fraude que se han presentado, como el de GBL, una plataforma de comercio de Bitcoin que de mayo a septiembre, según Bloomberg, acumuló más de 4,493 usuarios registrados y que cerró de forma abrupa el 26 de octubre.

Según reporte de la agencia oficial Xinhua, el monto total de lo robado a los inversores no está claro.

Este tipo de reportes se suma a otros casos como el de Alemania, donde ya ha habido detenidos por presuntamente haber generado bitcoins de manera ilegal, por cerca de un millón de dólares.

Con todas estas presiones, ahora el portal Baidu Inc, el motor de búsqueda más grande de China, también ha dejado de aceptar bitcoins a partir del viernes pasado, pues las grandes fluctuaciones de su precio “lo hacen incapaz de salvaguardar los intereses de los usuarios”.

En suma, si es que Bitcoin tiene futuro, insistimos en que a pesar de las ganancias que pueda prometer –y que es lo que en verdad atrae por ahora la atención de los inversores, no debe perderse de vista que no es más moneda que una ficha de casino que puede (todavía) intercambiarse con libertad entre usuarios, a un precio determinado por el mercado. Qué bueno.

No obstante, está lejos, muy lejos de convertirse en una divisa como tal, y de hecho si es que algún día se acercara por casualidad a querer serlo, bastarán dos o tres “manotazos” en la mesa de China, Estados Unidos y Europa para echarla, junto con todas las demás “criptodivisas”, al bote de la basura junto con su verdadero valor: cero. Creer lo contrario, es pura ingenuidad. ¿Lo tendrán claro sus apologistas?

Reiteradas las advertencias, si decide operar con Bitcoin hágalo con cuidado, pero considere mejor invertir en su propia educación financiera para decidir, con pleno conocimiento, qué es lo que a usted más le conviene. El ingreso que se gana, y el patrimonio propio, valen eso y más.

viernes, 6 de diciembre de 2013

BRILLANTE FUTURO PARA LA PLATA




Imagen: golden-rule.org
Es bastante frecuente e inteligible que en materia de metales preciosos monetarios, el oro acapare siempre la mayoría de los reflectores.

Sin embargo, sería un error hacer a un lado a su eterna compañera, la plata, pues ésta ofrece en términos de refugio financiero, muchas de las ventajas de aquél a un precio mucho más accesible para la mayoría.

En este sentido, debemos subrayar que a las cotizaciones actuales alrededor de 19.60 dólares la onza, la plata sigue estando por debajo de su costo promedio de producción.

Según el banco de inversión independiente Dundee Capital Markets, los costos de los productores que analiza, a pesar de haber caído 13 por ciento durante el tercer trimestre de este año, mantuvieron un nivel medio de 20.08 dólares por onza.

Eso significa que cada onza que se compra en el mercado al contado, está siendo entregada a un precio menor de lo que le cuesta a una empresa minera extraerla de la tierra en estos momentos.

No es posible saber por cuánto tiempo se mantenga esta circunstancia, pero como le he comentado en entregas anteriores, el panorama para las materias primas (commodities) no alimenticias podría seguir siendo complicado en el futuro cercano, debido a un inminente “aterrizaje forzoso” de la economía china.

Sin embargo, en el caso particular de la plata, es importante que no se soslaye que ostenta una doble condición: la de ser un metal industrial y también monetario. Eso le da ciertas ventajas que el oro no tiene.

Así que si por un lado su demanda industrial se contrajera como es de esperar, de igual modo lo es que el apetito por ella como inversión se mantenga fuerte, e incluso aumente, aprovechando los bajos precios.

No olvidemos que mientras el oro está hoy en día 36 por ciento por debajo de su máximo histórico, la plata lo está en más de 60 por ciento, lo que la vuelve una opción más atractiva. En lo que va de 2013, su cotización ha tenido uno de sus peores años en más de tres décadas al desplomarse más de 36 por ciento.

Asimismo, debemos recordar que en India –hasta este año todavía el mayor consumidor de oro del mundo, el gobierno se ha empeñado en hacer todo lo posible por castigar el consumo de este metal en su intento por contener los desequilibrios que tiene en sus cuentas con el exterior.

En 2013, India ha subido en tres ocasiones el impuesto sobre sus importaciones áureas hasta llevarlo al 10 por ciento, y ha dicho a los importadores que una quinta parte de sus compras tendrán que reexportarlas.

Esto ha beneficiado a las importaciones de plata de ese país, que ascendieron a un máximo de tres meses en octubre pasado, con un total de 338 toneladas, y que están por marcar un nuevo récord este año según datos de Thomson Reuters GFMS.

Su analista Sudheesh Nambiath estima que para fin de año, las importaciones indias de plata ascenderán a un total entre 5,200 y 5,400 toneladas, muy por encima del record actual de 5,048 toneladas registrado en 2008.

De manera que mientras el precio del oro podría seguir sufriendo por India –para beneficio de los chinos-, su ascendente y acelerada demanda de plata podría marcar no solo un piso firme para ésta sobre 19 dólares la onza, sino incluso marcar el liderazgo en un eventual nuevo ciclo alcista luego de esta corrección.

Esto si consideramos que las minas de plata en todo el mundo producen alrededor de 24 mil toneladas al año, lo que implica que India, el nuevo protagonista de la plata en el planeta, estaría consumiendo hasta el 22.5 por ciento de esa producción. Asimismo, debemos considerar que casi la mitad de ella se destina a propósitos de inversión, con lo que los indios en los hechos podrían estarse quedando con el 45 por ciento del volumen global destinado a este rubro.

Además, debemos contemplar lo que ocurre en otras latitudes donde la demanda de plata de inversión también ha observado una escalada importante.

Onza de plata Libertad (México)
En Estados Unidos por ejemplo, la Casa de Moneda (US Mint) reporta que sus ventas de la moneda más popular, la American Silver Eagle, ascienden a la fecha a un nuevo récord de 41.8 millones de onzas.

En el país, según cifras de Banco de México proporcionadas a este periodista, de enero a octubre pasados el total de onzas de plata Libertad puestas en circulación fue de 733,146 monedas, lo que representa un incremento superior al 55 por ciento respecto a las ventas totales registradas en 2012.

Por otra parte, los fondos cotizados en plata (ETFs) han aumentado sus tenencias del metal blanco en seis por ciento en los últimos 12 meses, según información de Bloomberg citada por Sprott Physical Bullion Trusts. En cambio, los ETFs en oro las han recortado en 30 por ciento este año.

Como ve, a pesar de que en el corto plazo las cotizaciones de la plata podrían verse afectadas por diversos factores, lo cierto es que de ocurrir, podemos esperar que la demanda de ésta sobre todo para propósitos de inversión sea la más beneficiada.

En el fondo, ninguno de los aspectos fundamentales que sostienen su mercado alcista mayor han cambiado, y si lo han hecho, es solo para hacerlo aún más fuerte. El futuro de largo plazo para la plata, luce más brillante que nunca.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

¿Y QUÉ DIABLOS ES BITCOIN? (NO CREAS LO QUE TE DICEN)




Bitcoin se supone que no es una sino tres cosas: una moneda digital, un protocolo y un software, ligados básicamente para realizar transacciones punto a punto (P2P) y pagos, en todo el mundo, con bajos o nulos costos de procesamiento. 

Esta “criptodivisa” o dinero virtual, se ha convertido en la más popular de todas, de un total de 42 que hasta el momento contabiliza el portal Coinmarketcap.com.

Su software es libre de código abierto y opera sin una autoridad que la controle: no hay gobierno, ni banco central. Esta sensación de independencia sin duda la ha vuelto muy atractiva para muchos, y gracias a eso, su uso junto con su precio, se ha disparado.

De hecho, es la explosión de éste la causante de que ahora no haya ningún medio financiero que no publique notas y artículos sobre Bitcoin, cuando hace solo unas semanas la ignoraban por completo.


El gráfico siguiente (cortesía de Bitcoincharts.com) no deja lugar a dudas. Su crecimiento en los últimos dos meses fue espectacular. De 139 dólares el 1 de octubre a más de 1,200 dólares el 1 de diciembre. Pero eso, no es nada.


clic para agrandar

Debemos decir que no es la primera vez que Bitcoin tiene un comportamiento de este tipo. Antes hubo otros, uno en proporción más escandaloso, que deberían estar levantando muchas cejas, pues el patrón se está repitiendo en poco tiempo y no debería ser considerado como normal, sino hasta sospechoso.

Veamos. Su creador (o creadores) bajo el seudónimo de Satoshi Nakamoto, lo trajo a la luz en 2009, y en 2010, una vez que se comenzó a intercambiar por divisas, su precio pasó de cinco centavos a más de 30 dólares en junio de 2011. Para agosto, se había caído ya a 2 dólares.

Desde ese fondo avanzó a ritmo más moderado hasta los primeros cuatro meses de 2013, cuando aceleró la subida desde 13 a más de 260 dólares el 10 de abril. En menos de una semana, se  desplomó de nuevo hasta 50 dólares.

Como ve, la volatilidad de Bitcoin ha sido y seguirá siendo extrema. Con esta, ya es la tercera vez que esto se presenta. Tal vez hasta sus más fervientes promotores estén en un conflicto de intereses, buscando alentar más subidas de precio para intentar salir desde la posición más ventajosa posible, y claro, volviendo a comprar cuando se abarate.

¿O habrá “insiders” tomando ventaja, llenando sus bolsillos a costa de bienintencionados pero ingenuos fanáticos que compran caro y venden barato? Es una simple pregunta.

Lo cierto es que voces demasiado optimistas se están apresurando a calificar a Bitcoin incluso, como la próxima “divisa de reserva” que desplazará al dólar, al euro y “tan brillante como el oro”.

Vaya, ese tipo de calificativos no deberían más que recordarnos que con superlativos y promesas de ganancias exageradas, se han construido –y luego derrumbado, todas las burbujas y esquemas Ponzi de la historia.

Ahora, si le damos el beneficio de la duda y creemos que no hay mala intención en ella, Bitcoin no es una mala idea. Al contrario.

Son de reconocer todos aquellos esfuerzos que se hagan en aras de un sistema monetario justo, en el que la corrupción de las divisas no sea el común denominador, como por desgracia, sucede en nuestros días.

Con los mayores bancos centrales del mundo como la Reserva Federal (Fed)  estadounidense, el Popular de China, del de Japón, el Central Europeo y el de Inglaterra en una vorágine de impresión de divisas para “estimular” la economía, se fuerza a la gente a buscar refugios seguros a su poca o mucha riqueza.

Bitcoin se presume que habría surgido con la intención de ofrecer una salida de ese “agujero negro”.

Sin embargo, toda persona poniendo dinero en ella, debe ser cautelosa y percatarse de que muchos de quienes la promueven, están pasando por alto aspectos que en el mismo portal de Bitcoin.org advierten, como curándose en salud.

Por ejemplo, dice de manera explícita que se trata de una “nueva divisa experimental” en desarrollo, un “nuevo invento” del que “su futuro no puede ser predicho por nadie”.

Asimismo, que su precio es volátil, y por tanto “no se recomienda poner tus ahorros en Bitcoin en este momento”. Reconocen así que se trata de un “activo de alto riesgo” en el que no se debe apostar más de lo que se pueda perder, pues para decirlo claro, al ser un dinero virtual su precio puede llegar a ser, por la circunstancia que sea, un gran cero.
Imagen: blogs.cio.com

Bitcoin.org también hace notar que sus pagos son irreversibles, no del todo anónimos y que al no ser una divisa oficial, se requiere pagar todos los impuestos que apliquen en la jurisdicción de que se trate.

En resumidas cuentas, si Bitcoin no es una estafa, tampoco es una “divisa”. No es dinero real sino un “token”. Un mero símbolo y juego diseñado matemáticamente, y que gracias a la tecnología luce muy sofisticado y llamativo.

Es como aquellas fichas que se compraban (o compran) en establecimientos que ofrecían entretenimiento con juegos de destreza, azar y videojuegos. Tal vez esté bien divertirse un poco con ellas y a alguien le guste tirar dinero de vez en cuando, pero de ahí a pagar ridículas sumas por un instrumento virtual de intercambio que venden como “la próxima divisa de reserva”, le debería borrar la sonrisa a cualquiera.

Es una pena que en la actualidad nos hayan hecho olvidar qué es el dinero de verdad y cómo es que surgió.

Esa es la raíz del problema y nos pierde en confusiones.

El dinero es una institución social, establecida por la libre interacción de las personas en el mercado, que a través de un proceso de discriminación fueron utilizando diversas materias primas como el medio general de intercambio.

En los más distintos lugares y épocas, ese proceso ha concluido siempre en las dos sustancias más vendibles de todas, es decir, aquellas con el menor diferencial (spread) entre el precio de compra y de venta, gracias al apetito humano por aceptarlas de manera casi ilimitada: el oro y la plata. Valor de verdad.

En el fondo, ese trueque por dinero real, algo material que se recibe a cambio de un bien o servicio, es el que constituye un pago. La deuda ha dejado de existir.

Vaya diferencia con respecto al dinero “fíat” (dólares, euros, etc.), que es justo lo contrario: una deuda en sí misma, una promesa de pago que requiere ser canjeada por bienes tangibles y/o servicios para ser liquidada. Nadie quiere billetes por ser billetes, sino por lo que se puede adquirir con ellos.

¿Qué es entonces Bitcoin, si su “valor” está en función del precio que tiene respecto a otro falso dinero fíat, del que se supone pretende evadirse? Una deuda sobre otra deuda –nunca un pago, que aunque en teoría no puede ser creada sin límites, seguirán apareciéndole imitadores “más perfeccionados”.

Especulación es especulación. Para quien sabe jugarla o gusta de arriesgarse, mucha suerte con Bitcoin. Ojalá que les vaya bien.

Otros, seguiremos prefiriendo el anticuado camino seguro del sentido común para combatir a la Fed, a sus secuaces y a la sinrazón, con dinero auténtico (oro y plata) y activos reales. Disculpen ustedes nuestra “excentricidad”.